Comisiones Obreras del País Valenciano | 22 noviembre 2024.

El empleo según Lacalle

  • Artículo de Juan Carlos Gallart, secretario de Empleo y Política Institucional de CCOO PV

La empresa de Daniel Lacalle viene a certificar la defunción del Pacto por el Empleo, anticipada por el concejal Badenas en el mismo momento que optó por modificar unilateralmente los estatutos de la Fundación Valencia Activa, el instrumento municipal para coordinar e impulsar las políticas activas de empleo en nuestra ciudad.

24/09/2024.
Juan Carlos Gallart, secretari d'Ocupació i Política Institucional

Juan Carlos Gallart, secretari d'Ocupació i Política Institucional

Este verano hemos leído con estupor que el Ayuntamiento de València ha encargado a una consultora propiedad de Daniel Lacalle el nuevo plan de empleo para la ciudad. Hubo un tiempo, cualquiera que no fuera este, que desde el consistorio del Cap i Casal se consensuaba con los agentes sociales las cuestiones estratégicas en materia de ocupación. Consecuencia de estos hábitos definitivamente perdidos, hemos sido capaces de sacar adelante siete pactos de empleo con resultados más que satisfactorios. No exagero un ápice si digo que estos acuerdos han sido el único eje de la política municipal que ha generado un amplio consenso entre todas las fuerzas políticas y los agentes sociales a lo largo de tres décadas.

La empresa de Daniel Lacalle viene a certificar la defunción del Pacto por el Empleo, anticipada por el concejal Badenas en el mismo momento que optó por modificar unilateralmente los estatutos de la Fundación Valencia Activa, el instrumento municipal para coordinar e impulsar las políticas activas de empleo en nuestra ciudad. El objeto de entonces era suprimir las acciones de acción positiva y la perspectiva de género en las políticas públicas. Ahora, queda en manos de Lacalle el análisis y la definición estratégica de cómo combatir las desigualdades en materia de empleo y formación entre 2025 y 2028. Los agentes sociales al parecer ya no pintamos nada para Catalá. La alcaldesa parece desoír al president Mazón cuando reitera día sí y día también que el fortalecimiento del diálogo social es un pilar básico en la acción de gobierno del Partido Popular, con o sin ultraderecha incluida.

Daniel Lacalle es un economista ultraconservador de sobra conocido. Sus recetas, carentes del mínimo complejo, le llevan a despreciar sistemáticamente cualquier intervencionismo que no se limite a la rebaja de impuestos y la inmolación de cualquier vestigio de vocación redistributiva en la actuación de los poderes públicos. Por eso me pregunto qué pinta diseñando los ejes de empleo alguien que denosta el papel de la administración en el crecimiento del empleo o en el impulso de medidas que mejoren su calidad.

El paro, según este señor, se explica por el exceso de regularización –leáse exceso de derechos laborales–, por el Salario Mínimo Interprofesional y por los subsidios que convierten en ociosas a las personas. Con semejantes planteamientos piensen que quedará de los principios de actuación que caracterizarán las políticas públicas en esta materia. Me refiero a la igualdad de oportunidades, al enfoque de género, al desarrollo sostenible, la seguridad y salud laboral, la responsabilidad social corporativa, el empleo de calidad o la vertebración social y territorial de los distintos barrios. Todas ellas, líneas de actuación presentes en los sucesivos planes de empleo que desde tiempos de Rita Barberá han permitido contribuir, en mayor o en menor medida, a mejorar la situación del empleo en València.

Anticipo que no habrá pacto territorial por el empleo en la primera ciudad del País Valenciano, esencialmente porque no es posible sin el consenso de las partes que lo componen. Lástima que el gobierno municipal, en plena deriva ultra, haya buscado negarse a sí mismo en la flagrante contradicción de confiar el diseño de las políticas de empleo a quien las niega casi por definición. Para echarse a llorar. Y a temblar.

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